Mujer de 33 años de edad, diagnosticada de hernia cervical posteromedial en C3-C4, protusiones discales en C6- C7 y C7- D1, junto con rectificación de la lordosis cervical.
La paciente entra en consulta, presentando dolor en cuello y trapecios desde hace varios años, junto con mareos y dolores de cabeza, adormecimiento o parestesia de los dos brazos con férula nocturna en mano derecha por problemas de túnel carpiano. Presenta una limitación del movimiento global del cuello del 20%. La paciente trabaja frente a un ordenador, 8 horas diarias.
Una vez empezado el tratamiento; la paciente nota mejoría desde la primera sesión, disminuyendo progresivamente en intensidad y duración tanto el dolor, el mareo y las parestesias. En la 9ª sesión, la sintomatología había desaparecido por completo, permitiéndole una mejora en la calidad de su vida, tanto a nivel laboral como personal. Se le aconsejó realizar determinados ejercicios sencillos de propiocepción y fortalecimiento muscular durante y después del tratamiento.